La limpieza de las Gemas

El método más conocido y seguro que te suena es el de agua y sal: 

@ Se coloca la gema en un recipiente de cristal (el recipiente nunca será de plástico, de metal o de otro material) con agua a la que se añadirá sal. 

@ La proporción de agua y sal corresponde al tamaño de la gema y sus características. Por ejemplo, para una gema de canto rodado del tamaño de 1 euro bastaría un vaso de cristal de 1/4 de agua y una cucharada sopera de sal marina. 

@ La mantenemos en su interior de 4 a 6 horas. 

@ Luego se pasan por agua potable, se secan con un paño suave y se exponen al sol (me gusta tenerlas dos horitas después de la limpieza). También pueden exponerse a la luna pero siempre en luna llena!. Por eso recomiendo la fórmula más segura que es la energía sola y así no nos liamos. 

@ ¡Importante! > no todas las gemas toleran este método, y esto lo debes tener muy en cuenta. La mayor parte de las gemas en bruto (sin pulir), la azurita, la perla, el coral, la malaquita, algunos lapislázuli... etc.

El método marino

@ Se colocan las gemas que se quieren limpiar (normalmente puedes mezclarlas, pero no aconsejo que pongas gemas negras con el resto de cristales) dentro de una redecilla fina de tejido natural y se lavan en el mar. 

@ Primero en la orilla... dejando que lleguen a ellas al menos 3 olas -siempre en número impar-

@ Las limpiamos con agua potable, las secamos con un paño suave y las exponemos al sol. 

El método incienso-vela

@ Es apto para aquellas gemas que como comenté anteriormente no toleran el agua y la sal, pero igualmente podemos usarla en otras gemas. 

@ Este sistema consiste en pasar la gema por el humo de incienso -particularmente de Jerusalén o Sándalo- 7 veces y terminamos pasándola por la luz de una vela de color verde clara o blanca. 

  ¿Cuándo volver a realizar una nueva limpieza de las explicadas anteriormente? A los 6 meses o al año, depende mucho para qué las estás utilizando. 

  ¿Y las joyas con Gemas? >> puedes utilizar los métodos explicados anteriormente pero obviamente no puedes sumergir la plata en agua y sal durante mucho tiempo porque perjudicarías la plata. En este caso me gusta hacer el método del incienso, o hacer el método marino y luego secarla inmediatamente... 

Siempre recomiendo que todas las gemas deben mantenerse limpias y cuidadas... cuanto más las cuides más te durarán. Guardarlas en una bolsita de tela si las quieres llevar contigo, y recargarlas al sol siempre que lo desees. A mi particularmente me gusta llevarlas al mar -sobre todo en verano- y sumergirlas en charcos... luego las dejo secar al sol.